Un exceso de hombre, un exceso de santo
Brilló por su único milagro “la caridad”
Vio a los que nadie veía… A los desgraciados tirados en los desagües, cubiertos de mierda, comidos de piojos, tumbados sobre basura, los vio hambrientos, desarrapados, vencidos, infectos, los vio y decidió ayudarles: estimarlos, respetarlos, servirlos, amarlos. Les dio caridad.